Carlos Pinedo Texidor
686 - Otra vez a Pikakari.
Al igual que con Mayflower en Madrid, he encontrado en Pikakari un lugar al que ir a ver la vida pasar. Una playa a tres kilómetros de casa y desde donde puedo contemplar el atardecer y la bahía de la ciudad que me ha acogido.
Esta semana, aprovechando que mis colegas de la oficina de Malta están en Tallin me los he llevado a mi rincón. Un maltés, un sudafricano, un bengalí y un español, cargados de goodies han conquistado la arena rocosa, y en la playa que me ha visto escribir, hemos hecho lo que todo hombre haría, lanzar piedras al mar.
Entre cotilleos, debates absurdos, bromas de nuestros respectivos países que rozan el racismo (pero cariñoso) hemos pasado la tarde. Y en uno de esos días donde el sol no se pone hemos disfrutado de lo mejor que ofrece Tallin, una oportunidad para los que buscan labrarse una vida mejor.
Es curioso, ninguno de los cuatro nos habríamos imaginado hace un año viviendo una tarde como la de hoy. Y aún siendo de lugares tan dispares, con personalidades tan distintas, todos tenemos en común la voluntad de querer lo mejor para nuestro futuro, y nuestro actual curro nos ofrece esa posibilidad.
Cuatro colegas en una playa de Tallin, todos a miles de kilómetros del hogar familiar, y dentro de nuestras diferencias, agradecidos por la oportunidad de estar viviendo en un capítulo vital de la que nos acordaremos toda la vida.
Jueves 29 de junio de 2023
Tallin, Estonia
Recuerdo #686