Carlos Pinedo Texidor
504 - Un fuego y mucha comida.
El campo es la verdadera felicidad. Lugar de tranquilidad y aire fresco. Sitio idílico al que me retiraría a escribir y leer. Y eso que yo, cosmopolita de café y mercado, de vez en cuando necesito el gentío de ciudad para no perder la cabeza.
Es cierto que siempre he dicho que el día de mañana espero tener varios hijos de una misma mujer, una casa frente al mar y una buena biblioteca. Pero mentiría si dijera que la idea de tener un pequeño rincón en Ávila no me tienta. Y es que a menos de dos y horas y pico de Madrid mis amigos Gordo y Alfi tienen un refugio. Siendo estrictos es de su padre, pero los gemelos han hecho suyo el jardín con sus motos y varias hogueras. Y todo ante la atenta mirada de su hermana Paloma que me confesó en el coche que ella no había pisado tanto ese rincón de Malpartida de Corneja.
Por tratar de sintetizar un día tan completo, podría decir que fueron muchas horas de mucho fuego y mucha comida. Paloma y yo salimos de Madrid no más tarde de las doce. A las dos y pico estábamos sentados en la esquina de un mesón calentados por la chimenea. Yo llevaba varios meses sin echar el diente a una chuleta, aunque no pude disfrutarla porque cuando llegó el turno de los segundos ya llevábamos varias de croquetas, mollejas y alcachofas.
Después de una copiosa comida, los gemelos, Paloma, Krusty y yo nos echamos al campo. Pretendíamos subir a un pequeño cerro que tienen cerca de casa, pero un par de mastines sobre protectores no nos dejaron cruzar los pastos donde andaba el rebaño bovino. Nos tuvimos que dar la vuelta, no sin antes acordar jugar a eso de las ocho al ajedrez con vino, queso y una hoguera.
Cuando dieron las doce de la noche, las botellas vacías se contaban por la media docena, la leña consumida por la decena y la comida ingerida suficiente como para querer ayunar varios días. Fue un día de mucho fuego y mucha comida, uno de esos que representan a la perfección las costumbres españolas que tanto aprecio.
Jueves 29 de diciembre de 2022
Malpartida de Corneja, España
Recuerdo #504