España tiene una cultura increíble,
podemos hablar de artes y las gentes
incluso de la actitud afable.
Tal vez sea para mí, la más curiosa
aquella costumbre de barra y pincho
café y cerveza, incluso en domingo.
Postrado en la barra, cualquier niño
disfruta con su chocolate y tres churros
los padres chismorrean, sin delito.
Las familias intercambian los abrazos en su sitio.
la barra se convierte en un ciclo,
entran y salen, piden y vuelan los pinchos.
Ahora con tantas redes sociales
se ha perdido un poco
las costumbres generacionales.
Casi nadie joven acude a la barra
prefieren ir a por aguacate y tostadas
mientras pelean en los foros más dispares.
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