Hace tiempo que oigo en muchos de mis amigos la misma frase. Empiezo a oír cientos de excusas y razones nobles por las que uno decide dejar atrás el fútbol.
En mi caso, por motivos que no vienen ahora a cuento sufro una locura no tan transitoria de esas de Robe. Desde hace cinco años vivo por y para el fútbol. Ya sea mi querido Atleti, jugar con mis amigos al fútbol siete o pelear en Alcobendas en aquellos inmensos campos de fútbol once.
Mi locura se ha visto potenciada por mi repentina buena forma, puedo hacer y jugar de formas que nunca pensé, he tenido que reconvertirme en lateral para poder aprovechar mi resistencia y velocidad, y aún con todo ello, me sigue surgiendo la pregunta que oigo a mis amigos.
Creo que aún me queda mucho fútbol, al menos eso me ha dicho alguna persona que respeto y admiro. También creo que esto del fútbol es como un ligue, a veces el espacio te hace entender todo un poco mejor.
No sé si esta temporada seguiré jugando al fútbol once, al menos tengo claro que los motivos son externos. El viernes decidiré.
Martes 21 de septiembre de 2021
Madrid
Recuerdos con contexto 039
